La genialidad de Alfred Hitchcok, se mezcla con el glamour y elegancia de Grace Kelly y se añade la maravillosa actuación de James Stewart, como resultado obtenemos este clásico de los “thrillers” del “Old Hollywood”, siendo ésta una película que en mi opinión, nadie debería perderse. 

Un fotógrafo profesional que se encuentra temporalmente encerrado en su departamento, en un peculiar vecindario de Nueva York, con una pierna rota y en silla de ruedas, se dedica a espiar a todos los departamentos del conjunto de edificios de enfrente, cuyos dueños dejan sus ventanas abiertas revelando así parte de sus vidas, con una novia sofisticada e intuitiva como lo es Lisa Freemont, interpretada por la siempre eterna Grace Kelly, el fotógrafo “Jeff” mantiene una vigilancia secreta a todo el que se atreva a ventilar por la ventana su vida privada. Cuando la esposa de uno de los vecinos de enfrente desaparece misteriosamente, Jeff comienza a entrelazar cabos afirmando que su vecino es un asesino, pronto el espionaje y misterio atrapan al espectador que aunado a la espectacular actuación de Grace Kelly, te mantiene atento hasta el final.

 Todos sabemos que está mal espiar la vida privada de los demás, pero por alguna razón es completamente irresistible, a final de cuentas eso es lo que todo espectador que disfruta de ir al cine o de ver una película hace, espiamos a través de una lente la vida de los demás. 

El argumento es en realidad muy simple, se podría considerar que la película es incluso lenta, el set tiene un increíble simpleza y genialidad, está compuesto por un patio central y varios edificios con ventanas pero la excelente narrativa de Hitchcok es lo que hace esta película brillante y cautivadora, digna de ser considerada todo un clásico del Hollywood Dorado. Uno no puede fallar con Hitchcok pero definitivamente “la ventana indiscreta” califica como una de mis favoritas.

DIEGO F.